jueves, 9 de abril de 2020

Cárcel la Ciega 1737 - 1950 Por Tiberio Murcia Godoy*

 Revista Cromos 1932
Cárcel la Ciega
..
Honda, posee un gran historial de edificaciones y sitios, que en una u otra forma prestaron su servicio a las autoridades de la época. Y en este caso, la denominada Cárcel La Ciega, de la cual muchos hablaban, pero pocos mostraban evidencias de su existencia, hasta el pasado 5 de abril del presente año, cuando Gabriel Jaime Cano Palacio, publico en su cuenta de facebook Fotografías Antiguas y Personas del Tolima, la fotografía, según Gabriel Jaime, había sido publicada en el año de 1932, por la revista Cromos., pero en la publicación realizada en el facebook, escribía un comentario “localización no identificada”.

Como un resorte me levante de la silla, frente al ordenador del escritorio, y aprovechando que era el día de mi pico y cedula de la cuarentena, y salí a buscar el lugar donde posiblemente se había hecho la toma de la fotografía en el año de 1932, tome varias fotos, y retorne a casa, a mirar la foto de Cromos, para compararla con la mía, y correcto, si era el lugar, y si era la Cárcel la Ciega, la ciega? Cuando a las cárceles a algunas recibian el nombre de panóptico, “Un panóptico es una construcción cuyo diseño hace que se pueda observar la totalidad de su superficie interior desde un único punto. ... La clave del panóptico radica en que, como los reclusos no podían saber en qué momento estaban siendo observados por el vigilante, éste podía distraerse o tomar tiempo libre” (1). .

Remontémonos a la historia de esta prisión que data del siglo XVIII, Tomas Sebastián Restrepo Navarro en su libro Impresiones y Recuerdos, escribe, “Cárcel. Es este edificio de aspecto exterior muy corriente; su construcción, parece que data de la Colonia si juzgamos por la fecha que nos muestra una gran piedra incrustada en el muro norte formando parte del mismo, en esta forma 1737.
El edificio es de dos pisos; y a no ser por el severo guardián que, con el rifle en posición de descanso unas veces, y otras al hombro, paseándose frente a la puerta custodia la entrada, no habría quien tuviese deseos de habitarla. Mas a despecho de ese centinela, entremos por esos pasillos donde provoca esculpir también la sentencia del poeta florentino: “Los que aquí entráis renunciad toda esperanza”.
Y es que hay allí calabozos  dignos de un cuento de Edgar Poe; el castigo español no era sólo para lo corporal; también y principalmente se encaminaba a flagelar el espíritu , pues la humedad del suelo, la pesadez del ambiente, y la oscuridad de lugar producen un raro abatimiento que necesariamente inducen a la reflexión y al arrepentimiento”. (2).  


El presidente había designado la cárcel desde 1644

Ángela Inés Guzmán, nos trae un hecho interesante acontecido frente a lo que hoy es el actual Templo de Nuestra Señora de El Carmen, la investigadora acota; “Un año más tarde (1644) el presidente Martin de Saavedra y Guzmán ejecuto la Real cedula (expedida el 4 de marzo de 1643). Señalo por Iglesia la que habían reedificado los jesuitas, por plaza la que quedaba junto a la iglesia. Designo casa de cabildo y cárcel”. (3).

Más adelante continua Ángela Inés, afirmando, “La construcción del espacio urbano de San Bartolomé de Honda prosiguió a lo largo del siglo. En 1769 se hablaba de la necesidad de agrandar la cárcel puesto que existente se componía de un calabozo sin ventilación, en donde estaban 16 presos. Para tal efecto se dispuso de la cuarta parte de lo producido por el puente sobre el Gualí, parte asignada al cabildo de la Villa. La ampliación de esta obra se demoró debido a la insuficiente disponibilidad financiera del ramo de de los propios. Finalmente ésta se obtuvo y mediante la aplicación de otros recursos monetarios se hizo evaluar la obra por el maestro carpintero Domingo Leal y por el alarife, Hernando Lozano. Se intento rematar la obra sin éxito, en 1770. La construcción de la cárcel y de de las salas capitulares no se terminó tan pronto, ya que en 1778 las obras estaban inconclusas”. (4).
.

*Miembro del Centro de Historia de Honda . Miembro de Redhicol. Docente Invetigador IED Puerto Bogotá, Guaduas, Cundinamarca


 Lugar donde estuvo la cárcel, hasta 1950
(Foto Tiberio Murcia Godoy. Domingo 4 de abril de 2020)
.


Gregorio Gutierrez
.
Este Reconocido poeta estuvo detenido en la Cárcel la Ciega e hizo un poema sobre su encierro..
Leer poema en este link
.
..

Gutierrez Gonzalez nace en La Ceja del Tambó, en Antioquia, Colombia, en 1826 y muere en 1872, en Medellín. Su carácter poético es de cantor del campesino antioqueño. Su poesía es descriptiva, sentimental pesimista y humorística. Sus estudios los llevó a cabo en los seminarios de Antioquia y Bogotá en donde se formó en literatura y filosofía. Coronó sus estudios en jurisprudencia, fue Majistrado del Tribunal Superior de Antioquia y varias veces representante; pero el poeta disfrutaba más del hogar, del campo, y de la compañía de doña Juliana Isaza quien fuera su esposa. Ella fue su inspiración, su musa y su apoyo en los momentos difíciles de la vida; porque, aunque era un hombre preparado y agencioso le tocó vivir en la pobreza y en la necesidad; ésto, junto con los fracasos en los negocios y la pérdida de su patrimonio, le produjo mucha amargura y desconsuelo, de allí es donde brotan sus versos tan conocidos y tan populares entre los colombianos y el resto de América. La Quema, Las Dos Noches, La Visita son algunas de sus composiciones. En La Quema, por ejemplo, abundan las metáforas, pero su lenguaje es el lenguaje del campesino puro; es la manera de pensar del peón mismo. Es un cuadro primitivo en donde la ley del trabajo es la ley de la vida del labriego. En Las Dos Noches, de corte sentimental, manifiesta la angustia, la desolación, la aflicción, la tristeza; la noche de sus propias dudas y sus propios males. La Visita es un trozo humorístico que lo expresa con brillo descriptivo; es jocosidad, gracia y humor protagonizados por doña Josefa y el pequeño y gracioso Lisandro.(5).

.

Notas
(2)  Cárcel. Capítulo III. Impresiones y recuerdos. Tomas Sebastián Restrepo Navarro. Bogotá. 1922. Pág. 148
(3  Un caso atípico de aldea espontanea a Villa. Ángela Inés Guzmán. La ciudad del río Honda. 2002. Unibiblos. Bogotá. Pag.  42



Bibliografía

GUZMÁN Ángela Inés (2002) La ciudad del río Honda.Unibiblos Universidad nacional de Colombia.. Bogotá

RESTREPO  Navarro  Tomas Sebastián (1922) . Impresiones y recuerdos. Impresiones Paulinas Bogotá. Pág. 148

https://javicafe7.wordpress.com/gregorio-gutierrez-gonzalez/
.
.
Nos ha hecho llegar Don Manuel H. Cortes la siguiente información
.


Cárcel LA CIEGA de Honda.
Esta cárcel se hallaba ubicada donde hoy por hoy termina el puente Luis Ignacio Andrade del lado de honda.
Periódico EL VAPOR 18 de mayo de 1858.
Ahora, mi buen Antonio, te introduciré a la cárcel de este distrito, igual a las demás como lugar de miseria i hediondés y presta paciencia, por que esta carta lleva trazas de ser mas larga que las dos anteriores.
El edificio es nuevo, de dos pisos y mal construido, faltándole aún algunas puertas, tabiques i cielos rasos por que el contratista de la obra no ha cumplido, ni nadie lo hace cumplir, habiendo recibido ya el valor estipulado.
A la izquierda de la entrada se halla la pieza del despacho del Alcalde, atestada de mesas y armarios que se rebozan de papeles en desorden i de birienes i cartucheras de cuero sin curtir, que en un día de apuro en la última revolución mandó hacer el Alcalde a los zapateros del lugar los cuales apenas no poder hicieron por cartucheras zapatos de reverendo.
El Alcaide está en la taberna, i ha confiado a uno de los presos la custodia de los demás. Sabemos que tiene que ir a buscar el sustento por que no le pagan los sueldos, i que sirve por puro patriotismo, pues por patriotismo servimos todos. El Alcalde, a su vez, nos dice que no lo ha removido por que no ha encontrado otro menos malo, i que todos se escusan de admitir el destino por que no les pagarían los sueldos; viéndose en el caso de tolerar que el Alcaide actual se pavonee con ínfulas de tal en las tabernas, i que ocupe a los presos en llevar agua a las comadres
.

2 comentarios:

Diego T. dijo...

Tiberio ósea que la Ciega quedaba donde fue el bolivariano o donde empieza el puente luis Ignacio Andrade?.

TIBERIO MURCIA GODOY dijo...

Si señor